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El Ayuntamiento de Sevilla ha renunciado definitivamente a que la ciudad cuente con una mezquita construida en suelo de titularidad municipal y considera que la única posibilidad de que este proyecto prospere es que se lleve a cabo en terrenos privados mediante una operación de compra-venta, no de cesión.El delegado municipal de Urbanismo, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, afirmó ayer que la sentencia dictada este mismo mes por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) sobre el frustrado templo islámico previsto en Los Bermejales deja escaso margen de maniobra al Consistorio y frustra la posibilidad de seguir adelante con la alternativa prevista, que pasaba por situar la mezquita en otra parcela municipal, localizada junto a Cartuja 93.Celis confirmó ayer ante los periodistas que los servicios jurídicos de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) han determinado en un informe que la calificación de dicha parcela como suelo destinado a la dotación de servicios abre la posibilidad de que posibles afectados por la cesión para la construcción del templo islámico pudieran acudir a los tribunales amparados por la sentencia que tumbó el proyecto de mezquita en Los Bermejales.Según falló el TSJA, el Ayuntamiento no puede determinar el uso de un espacio destinado a dotaciones sin contar con la opinión de los vecinos de la zona, dado que la prioridad a la hora de ocuparlo deben ser los equipamientos comunes. En el caso de la mezquita, según la sentencia, ésta pretendía dar servicio al conjunto de la población musulmana de Sevilla, no sólo a la barriada de Los Bermejales, además de convertirse en "un referente" a nivel europeo dasas las dimensiones del proyecto.Gómez de Celis apuntó que el gobierno municipal se reunirá en breve con la Comunidad Islámica de España, promotora de la mezquita, "para estudiar la situación", si bien el delegado sugirió que el Ayuntamiento tiene escasas posibilidades de actuación: si la comunidad islámica mantiene su intención de lograr una nueva cesión de suelos calificados para la dotación de servicios, éstos no podrán ser públicos, por lo que la alternativa sería en este caso que acudiese al sector privado. Ello no impediría que el proceso se resolviera mediante la convocatoria de un "concurso público abierto" al que podrían presentarse otras ofertas para la adjudicación de los suelos. Una vez analizados los proyectos presentados, la adjudicación se resolvería en favor del que más beneficios reportase a la comunidad.Dado que esta posibilidad es remota, como el propio Gómez de Celis admitió dada la escasa oferta de suelos de este tipo, la salida más factible es que los promotores de la mezquita acudan finalmente al mercado y compren la parcela que puedan y consideren oportuna.La incógnita es qué pasará con los 200.000 euros que la Comunidad Islámica de España asegura haber invertido hasta ahora para hacer realidad su mezquita. El responsable de Urbanismo mantuvo que el Ayuntamiento "no se ha planteado" la posibilidad de indemnizar a los promotores, si bien fue el Consistorio el que con sus decisiones dio pie a que el proyecto diera sus primeros pasos.Fue en marzo de 2005 cuando la Junta de Gobierno del Ayuntamiento acordó la cesión gratuita en Los Bermejales de 6.000 metros cuadrados de suelo, durante 75 años, a la Comunidad Islámica. Los vecinos lograron la paralización judicial de las obras en abril del año siguiente, aunque una sentencia dictada en noviembre de 2007 les negó la razón. La resolución definitiva ha venido ahora de la mano del TSJA.